Algunos consejos para alquilar un trastero pueden ayudarte a tomar una decisión que te ayude a aprovechar mejor el espacio a un bajo coste y hacerlo ajustándose a las necesidades de cada circunstancia. El trastero es uno de los espacios de la casa donde se guardan la mayoría de las cosas en desuso y, a veces, se hace sin un orden determinado. Como consecuencia de ese desorden, no eres capaz de aprovechar el espacio que tienes y cuando buscas algo, siempre tardas en encontrarlo.
Una de las cosas que hay que tener en cuenta antes de organizar un pequeño trastero es saber exactamente qué se quiere almacenar. Por lo tanto, debe evaluar el volumen, el peso y la cantidad de los artículos que desea colocar en él, ya que esto será esencial para elegir un sistema de almacenamiento que se adapte a su armario y al espacio que ofrece.
Con estos consejos para alquilar un trastero, le ayudaremos a optimizar su espacio de almacenamiento y le mostraremos cómo organizarlo de la mejor manera posible. A continuación, le mostraremos varios sistemas de almacenamiento y sus características que le ayudarán a optimizar su espacio de almacenamiento y a mantenerlo ordenado al mismo tiempo.
- Estantes y armarios de resina
- Estanterías metálicas modulares
- Estantes y soportes de aluminio
- Cajas y accesorios
- Estantes y armarios de resina
Una de las grandes ventajas de este tipo de sistema es que es muy fácil de montar, sin necesidad de herramientas. Las estanterías y los armarios de resina están fabricados con materiales muy duraderos y son fáciles de mantener; pueden utilizarse para guardar objetos delicados o ropa. Al estar equipados con puertas, protegen el contenido lo mejor posible del polvo y pueden adaptarse fácilmente a un almacén, ya que hay una gran variedad de tamaños y dimensiones.
Estanterías metálicas modulares
Esta elección permite optimizar al máximo los espacios reducidos. Gracias a la gran adaptabilidad de las estanterías modulares, se pueden crear estanterías con infinitas combinaciones de estantes según las necesidades. Las piezas de las estanterías se compran por separado y están disponibles en una amplia gama de tamaños.
Además, gracias a que los estantes son ajustables, puedes construirlos a la medida de lo que quieras colocar en ellos. Así, será usted quien componga la estantería según sus necesidades exactas. Estas estanterías son muy prácticas y muy recomendables para los trasteros con techos inclinados, ya que se adaptan perfectamente a las superficies irregulares y no presentan el problema de encontrar la forma de encajar un mueble en ellas. Están disponibles en dos formatos de montaje: con tornillos (para objetos ligeros) y sin tornillos (para cargas más pesadas).
Estantes y soportes de aluminio
Esta opción es extremadamente versátil y le permite crear un sistema de almacenamiento que puede encajar en cualquier esquina, espacio pequeño o techo inclinado. Puede combinar diferentes tamaños y alturas de estanterías en función del espacio que tenga y del tamaño de los artículos que desee almacenar. Este sistema se compone de dos elementos de fácil instalación: las baldas metálicas -que son perfiles que se anclarán a la pared- y los soportes, también de aluminio, que encajan perfectamente en las baldas. Puedes colocar cajas o cestas en ellas para ayudarte a guardar tus objetos personales.
Cajas y accesorios
Para los objetos pequeños o delicados que requieren más protección, puede finalmente utilizar cajas comunes, disponibles en el mercado en todas las formas y tamaños. Algunos de los tipos más comunes son las cajas de cartón y las cajas de plástico; éstas son muy resistentes y duraderas, además de que al ser transparentes son preferibles ya que pueden revelar su contenido sin que tengas que abrirlas necesariamente.
También existen en el mercado cajas apilables y cajones de plástico para guardar pequeños objetos como documentos, herrajes y herramientas diversas. Facilitan el orden de esas herramientas que siempre son complicadas de almacenar. El uso de etiquetas para colocar como nota de contenido en tus cajas es siempre una buena idea que quizá subestimes hoy, pero que algún día agradecerás haber puesto en práctica cuando busques algo.